Estudiando los modelos de cambio podemos ver que existen algunos, como el patrón triple, que encontraremos con poca frecuencia al invertir en bolsa. Pese a esto, saber identificarlos o al menos conocerlos puede resultar interesante y ser un buen punto de partida para ver otros más comunes como el patrón doble.
En este caso hablamos de unas pequeñas variaciones del patrón de “cabeza y hombros”que resulta algo controvertida entre los chartistas más teóricos por lo complicado que puede resultar en ocasiones diferenciar al patrón triple del original.